Contemplando la presencia de Cristo en Pascua
Algunos testimonios durante Pascua, tiempos difíciles que, a pesar de ello, nos ayuda a vivir de una forma verdadera, a través de la singular Presencia de Cristo entre nosotrosLa difícil situación que vivimos hoy en día a nivel mundial, por un lado, nos trae desconcierto, angustia e incertidumbre y, por otro lado, nos pone frente al sufrimiento, al dolor y a la desesperación en un panorama cada vez más caótico.
A pesar de las dificultades, esta Pascua ha sido una experiencia distinta, ya que, nos ha tocado compartirla a la distancia; cada uno desde su contexto y circunstancia, con interrupciones físicas, técnicas e incluso mentales. Esta vez, pudo hacerse visible el verdadero recinto de este retiro espiritual: el corazón. Decenas de corazones conectados para compartir una experiencia única: el encuentro con Cristo.
No puedo decir que he pasado una bonita Pascua, pero digo, en cambio, que la he vivido a través de este encuentro, participando de los cantos y las lecturas, ensimismada en la belleza al contemplar obras maestras de arte, música y pintura. Todo ello ha marcado el sendero para mi encuentro personal con Cristo, contemplando con el corazón el suceso de su muerte y resurrección, cuya presencia viva permanece en nosotros, y nos ayuda a vivir de una forma real y verdadera.
Agradezco la iniciativa de los amigos de acompañarnos, siendo verdaderamente hermanos, sosteniéndonos unos a otros para no perder de vista, sobre todo hoy, la presencia de Cristo en nuestro vivir diario.
Karen, Lima (Perú)
Cuando me hicieron la propuesta de realizar una de las lecturas para celebrar la Pascua 2020, en medio de la cuarentena que todos estamos pasando en el mundo, no dude en decir que sí.
Las lecturas que me correspondieron eran de El misterio de la caridad de Juana de Arco, cuando las leí por primera vez, me sorprendí de que eran textos muy intensos, que transmitían lo que habría sufrido María. Me puse a pensar que la pasión de Cristo no solo fue de Él; también la padeció su madre, incluso los apóstoles y los que lo siguieron, y ahora nosotros compartimos esa pasión en las dificultades que estamos atravesando.
Era un texto importante para mí, necesitaba que me ayudaran a practicar para poder transmitirlo. Andrea me ayudó proporcionándome el teléfono de un amigo suyo, Víctor, quien muy amable me escuchó y me envió audios para corregirme. Asimismo, logré comunicarme con la profesora Contini en Italia, que también con consejos, me ayudó con las lecturas, diciéndome que lo más importante es: «piensa en lo que estás leyendo».
Cuando llegó el día estaban conectados mis invitados, un amigo sacerdote desde Argentina y Alexandra. Al finalizar, quedé impactada con todas las lecturas y cantos, que simplemente transmitían toda la belleza y la potencia del hecho de Cristo, presente en medio de nosotros.
Agradecí a Álvaro por su ayuda diciéndole: «Es el misterio de Cristo que atraviesa todas las dificultades para hacerse presente», mientras que él me respondió: «A través de una carne que ha sido la de ustedes, ahora».
Definitivamente, tener esta compañía en medio de la crisis actual, nos ayuda a reconocer que nuestro deseo está por encima de todas las dificultades, y que Él siempre se hace presente.
José María, Lima (Perú)